También en la negación hay deseos sueltos,
los que esperas que nunca se cumplan,
«Te deseo que no se escape tu tiempo sentado a la sombra de una excusa,
que no maten tus ilusiones y nadie se pregunte por qué,
que no te digan adiós con desprecios ni te hagan (h)olas con interés,
que no te bajen la luna para que luego te parta un rayo,
que no se acuerden los tuyos cuando sólo te quede su recuerdo,
que no des todo, esperando algo,
que no sirvas de segundo plato al ego incontrolado de un complejo,
que no te sientes en una mesa de más de tres y te ahogues con los que sobran,
que no regales tu corazón abierto a puertas cerradas,
que nunca te dejen caer al vacío desde la altura de una injusticia,
que no tengas que colgar de tu árbol despedidas imposibles con sabor a amor para siempre…»
Por ti este no,
porque lo que te rodea y espero que ni siquiera te roce,
por esa vida medio adolescente que demuestra todos los días que eres un HOMBRE de principios pero sin fin,
por Hugo,
por ese enorme corazón que a pesar de la adversidad crece intacto. @situmiradanomiente